Crisis de salud y dilema ético

COLUMNA VERTEBRAL

Por: Juan Ceballos Azpe

BUENA NUEVA.- La crisis que enfrenta el sector salud del gobierno deriva del hecho de que los presupuestos del IMSS e ISSSTE se han ido rezagando en los últimos 10 años: México invierte poco y mal en salud pública, mientras que la pandemia por el coronavirus va en aumento y se multiplican las denuncias por la falta de condiciones para garantizar la seguridad de enfermeras y médicos, quienes se han visto obligados a comprar ellos mismos material para atender la contingencia, además de ser víctimas de agresiones físicas y verbales de personas que creen que les pueden transmitir el virus. 

A la par, crece la percepción de los mexicanos de que el Estado es incapaz de garantizar su derecho a la salud y a la vida, mientras que la 4T sigue aferrada en derrochar recursos en el Aeropuerto de Santa Lucía, la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya, en lugar de invertir en las carencias sanitarias.

 Por otra parte, en algunos países se crean protocolos de actuación ante la situación extrema de tener que decidir quién de los enfermos vivirá y a quién se le dejará morir, privándolos de la atención médica para dar prioridad a los jóvenes sobre los viejos por haber vivido más años, en un dilema de bioética ante una medida violatoria de los derechos humanos y de naturaleza a todas luces discriminatoria al sugerir que se deje morir a los ancianos, lo que recuerda la distopía 1984 de George Orwell, o la época del nazismo de acabar con el derecho a la vida de las personas por su edad. También nos recuerda la teoría darwiniana de las especies, en la que se impone la ley del más fuerte o del que tiene mayor capacidad de adaptación.

 Estas dos preocupaciones –el rezago en el presupuesto de salud y la disyuntiva de priorizar la vida de los jóvenes sobre los viejos– deberían ocupar a las autoridades gubernamentales para cambiar el angustiante panorama de incertidumbre por el tranquilizante horizonte de la certeza de que se están tomando las decisiones correctas y ejecutando las acciones adecuadas, que son la COLUMNA VERTEBRAL para encarar con éxito la grave crisis de salud y el complejo dilema ético.